Las imágenes como recursos didácticos y componentes de la comunicación visual, tiene un valor incuestionable, ya que ofrece una gama de posibilidades didácticas muy enriquecedoras pues motivan, sensibilizan y permiten centrar con mayor facilidad la atención de los alumnos al abordar un tema o contenido.
Las imágenes representan un fragmento del entorno y son una herramienta de gran utilidad por su carga informativa en la presentación de información, textos y exposiciones para hacer más significativo el aprendizaje, ya que acercan a los estudiantes a situaciones de la vida real y coadyuvan al desarrollo de las habilidades del pensamiento. Una imagen evoca y proyecta información a los otros, por eso se considera un estímulo visual muy significativo.
El uso de imágenes hace más atractivo el trabajo, sobre todo para quienes aprenden o procesan la información de manera visual, por ello es necesaria la selección cuidadosa de aquellas que cumplan verdaderamente con el propósito de comunicar y de enriquecer el proceso enseñanza-aprendizaje.
El arte es una parte de la enseñanza que nos ayuda a crecer creativamente para desarrollar nuestras habilidades motoras y a perfeccionar nuestro trabajo, todo depende del tipo de arte que estemos desarrollando puede ser la sensorial, cognitiva, auditiva, etc. Parte de las artes visuales ayudan a identificar, traducir y transformar diferentes significados para el conocimiento viéndolo cada quien desde su perspectiva.
Las artes en las diferentes culturas han ido ganando el reconocimiento como fortaleza de la misión educativa, como son promotoras de un saber que integra en el conocimiento la armonía del ser y la expansión sensible. Toda imagen visual está constituida por ciertos elementos que conforman el lenguaje plástico visual.
La información sobre los más diversos recursos les permitirá mantener un verdadero equilibrio entre una acción orientadora y estimulante, provocadora de respuestas creativas y un clima de libertad. La base de operaciones se encuentra en el cerebro, y la danza se alimenta de electricidad, química y significaciones. El modo funcional del hemisferio izquierdo es intensamente ejercitado por nuestra cultura, jerarquizando sus posibilidades de organizar, clasificar, definir, numerar, y que se han tomado como los componentes básicos del pensamiento racionales. Son algunos de los antecedentes para poder ver la importancia que tiene mezclar el arte con el conocimiento.
La información sobre los más diversos recursos les permitirá mantener un verdadero equilibrio entre una acción orientadora y estimulante, provocadora de respuestas creativas y un clima de libertad. La base de operaciones se encuentra en el cerebro, y la danza se alimenta de electricidad, química y significaciones. El modo funcional del hemisferio izquierdo es intensamente ejercitado por nuestra cultura, jerarquizando sus posibilidades de organizar, clasificar, definir, numerar, y que se han tomado como los componentes básicos del pensamiento racionales. Son algunos de los antecedentes para poder ver la importancia que tiene mezclar el arte con el conocimiento.
El proceso de comunicación es bidireccional, es decir, hay dos partes que están involucradas, un emisor y un receptor. Se requieren ocho pasos, sin importar si las dos partes hablan, usan señales manuales o se sirven de otro medio de comunicación; tres de esos pasos corresponden al emisor y los restantes al receptor.
Un emisor inicia el proceso de comunicación construyendo un mensaje y enviándolo a un receptor, éste a su vez analiza la información y reconstruye el mensaje a la luz de sus propios antecedentes y experiencias, los cuales le servirán para sintetizar la información recibida. El receptor analiza y reconstruye los significados del mensaje, sintetiza y construye significados y se convierte en un emisor al responder al mensaje que le fue enviado.